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No soy el unico loco:

lunes, 25 de marzo de 2013

¡QUÉ DÉBIL!

dIÁLOGO monologoso



-Hace un par de meses me dabas la razón. Hoy cuando empiezo a "perder" por defender lo que creo ya me decís que dé el brazo a torcer. No entiendo.

Durante la Inquisición los pocos científicos que había eran obligados a no contradecir lo que la Iglesia Católica decía. Y si alguno descubría, por ejemplo, que el sol no giraba en torno a la Tierra sino que era la Tierra que giraba dentro del sistema solar, era obligado a retractarse o moría quemado en la hoguera. Claramente vos serías de aquellos que decidieron retractarse por miedo a perder la vida pero a expensar de vender lo más preciado, la propia dignidad. Yo hubiese priorizado y priorizo la dignidad.

Maduramos cuando le perdemos el miedo a vivir, nos convertimos en héroes cuando le perdemos el miedo a morir. La vida es un juego y morir ganancia, así que si vas a pelear que sea con ganas.

¡Qué débil! Recién estoy empezando a "perder" y ya me aconsejás que ceda.
Todo lo que hacemos hoy repercute en el futuro. Lo que hago hoy me entrena para mañana; si cedo a la primera de cambios ¿qué clase de ser humano estaría demostrando ser? De la peor calaña que existe, aquellos que sobreabundan y sobran... aquellos que tienen precio. "No hago abortos pero por un buen precio todo es negociable", "No hace falta putos, hace falta financistas", "tirame unos cuántos palos y te absuelvo de todos los cargos" y lamentablemente el precio no siempre es plata.

Hoy el precio que pago para defender lo que creo son años de carrera y los pago con orgullo. Mientras mayor sea el sacrificio más grande es la virtud.